En ausencia de las personas que mas queremos, puede aparecer otra que lleguemos a querer mas....y aunque nos da miedo que eso pase, llega a ocurrir. De repente esa persona se encarga de llenar ese pequeño vació que se forma de la necesidad de sentirnos queridos. Y nos resulta increíble como nos roban la atención, con el simple hecho de sentir que están ahí, y ver sus rostros iluminados al compartir con nosotros un espacio de nuestras vidas , nos llena tanto , que damos Gracias a Dios, por una bendición más.
El estar presente, cuando nos mudamos, cuando vamos de compras, cuando los niños están de cumple, cuando nos enfermamos, cuando culminamos un curso, cuando emprendemos una nueva vida , cuando nos rompen el corazón, cuando el hombre/ la mujer que amamos llega a nuestras vidas, cuando nos ponemos un poco más viejos o cuando simplemente queremos ver la película del momento.
El hecho de sumarnos en la historia de la gente, es un regalo con un valor invaluable y único, es una razón para reír, sentirnos especiales, es una oportunidad de ver la vida desde otro lado, es el descubrimiento de la felicidad en otra forma.
No dejemos de vivir esta experiencia y hagámonos presente donde de verdad se nos ama.
Autor: Altagracia Rodríguez Soto. "Tata"
19/08/05
1: 43 p.m
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